Van Halen collage

Van Halen collage

jueves, 28 de mayo de 2015

Blackberry Smoke encabezan el aluvión de conciertos que se avecina para octubre

Muchas veces nos quejamos de la ausencia de buenos conciertos de rock en España, pero los tiempos están cambiando. Poco a poco, empiezan a surgir fechas de citas imprescindibles para los seguidores de tan maltratado estilo musical. Dejando aparte los festivales, cuya oferta es algo más variada pese a que sigue sin haber ninguno de referencia (el Resurrection está en ello), después del verano se avecinan un buen puñado de actuaciones que, salvo imprevisto, no me pienso perder. Pequeñas promotoras como Mad Note Co. se han puesto las pilas jugándosela a un caballo ganador que está ahí escondido, pero que pasará por encima del incremento del IVA y todos esos inconvenientes que impiden que los mejores artistas foráneos vengar a tocar a nuestro país. Por encima de todas destaca la visita de Blackberry Smoke, la gran promesa (o ya realidad) del rock sureño que aspira a suceder en el trono a los mismísimos Black Crowes. En algunos medios les ven como los nuevos Lynyrd Skynyrd. En ambos casos son palabras mayores y sólo el tiempo lo dirá, aunque trabajos como The Whippoorwill o el último Holding All The Roses están a la altura de los más grandes. Les están dando mucha promoción desde Inglaterra, su doble disco en directo demuestra lo que pueden ofrecer y, en lo que a Madrid respecta, estarán el próximo 17 de octubre tocando en la Sala But.


Pero las buenas noticias no se acaban ahí. La semana anterior hay un doblete viernes-sábado más que atractivo. El 9 de octubre en la Sala Arena, dos grupos no muy mayoritarios, pero bien conocidos por los viejos rockeros, ofrecerán un doble cartel con el mismo tiempo sobre el escenario para cada uno. Por un lado, los veteranos Junkyard, supervivientes de la mejor época sleazy americana de principios de los 90. Son imprescindibles sus dos primeros discos (Sixes, Sevens and Nines es una maravilla) y después de han reeditado otros trabajos que se quedaron en el cajón en su día como XXX o Joker. En realidad, no vienen a presentar nada nuevo, pero tienen una buen fondo de armario que atronará la sala con ese rock sucio californiano que algunos tanto echamos de menos. La otra parte del cartel la lidera Dan Baird, esta vez con Homemade Sin, uno de los múltiples proyectos en los que este perro viejo del rock está implicado. Su sola presencia asegura un concierto de calidad y además del repertorio propio del grupo, seguro que echará mano de otras creaciones suyas en Georgia Satellites o versiones de clásicos muy conocidos. Y para el que le aguanten las fuerzas, en el mismo sitio, pero un día después, el mítico Glenn Hughes nos visita de nuevo. Una vez enterrados Black Country Communion y California Breed (vaya discazos han dejado), el bajista/cantante se presenta en solitario. Está como nunca, no sé si por haber hecho algún pacto con el diablo, y promete un setlist variado de toda una carrera que da para mucho. Sólo con que caiga algo de Deep Purple me daré por satisfecho. En fin, que octubre se presenta potente. La oferta es variada, las entradas ya están a la venta a buen precio. Hagan juego señores/as, porque la apuesta es segura.

martes, 26 de mayo de 2015

Los Stones tocan el Sticky Fingers entero en un concierto secreto en Los Angeles

"No fueron al principio santos de mi devoción...", decía una canción de Loquillo titulada Simpatía por los Stones. Así empezó mi relación con sus majestades satánicas. Me costó mucho entrar en su amplia discografía, pero una vez dentro, ya se sabe, me atraparon para convertirme en seguidor incondicional del grupo de rock más grande que ha existido hasta ahora. Más de medio siglo de actividad del mítico grupo inglés dan para mucho, son un icono universal de la música, y afortunadamente siguen vivitos y coleando. Y de qué manera. Lejos de pensar en la retirada, el pasado 20 de mayo se sumaron a la moda de tocar discos enteros en directo. En un Fonda Theatre abarrotado (las entradas duraron minutos) ofrecieron un concierto secreto, íntimo, para desgranar, aunque no por orden, todos los temas del Sticky Fingers unidos a algunos de sus clásicos eternos. Casi nada al aparato en Los Angeles, vaya suerte tienen algunos. Fue el calentamiento para la gira americana Zip Code que comenzará el día 30 en Ohio. De paso, promocionaron el lanzamiento de las ediciones especiales del famoso disco de la cremallera que serán editadas el mes que viene. Una portada en su día polémica diseñada a partir de una idea de Andy Warhol que, por cierto, fue censurada en España y sustituida por otra en la que unas manos grasientas salían de una lata de melaza. En realidad, reflejaba el verdadero significado del título y se convirtió en un objeto de coleccionismo. Curiosamente, ahora saldrá a la luz en todo el mundo ilustrando el doble vinilo de la inminente reedición de Sticky Fingers. Además, fue la primera vez en la que aparecía en logotipo de la lengua y los labios que identifican a los Stones ideado por John Pasche.



Sin lugar a dudas, estamos ante uno de los mejores discos de rock-blues de todos los tiempos con temas indispensables como Brown Sugar, Wild Horses, Can't You Hear Me Knocking (ese riff, por favor), Bitch, Dead Flowers, Sister Morphine... Todos son una maravilla. Todavía estaba en el grupo Mick Taylor, que para mí ha sido el mejor guitarrista que ha pasado por sus filas. En mi opinión, aquel habitante de esta galaxia que no mueva los pies, u otra cosa, con este artefacto tiene un problema que debería tratarse urgentemente. Con un poco de suerte, este evento tan especial fue grabado en su totalidad para ser publicado cuando la maquinaria Jagger-Richards lo estime oportuno. Yo no me lo perderé si al final ocurre. No sé cuándo colgarán las botas, ya que supongo que morirán encima de un escenario. Que sigan haciendo estas cosas demuestra algo que siempre he pensado: continúan adelante porque disfrutan con lo que hacen. No hay otra explicación ¿Por dinero? Lo dudo, porque les debe sobrar. Es sólo rock and roll, pero les gusta. Y a mí también.

Set List del concierto en el Fonda Theatre:
Start Me Up 
When The Whip Comes Down
All Down The Line
Sway
Dead Flowers
Wild Horses
Sister Morphine
You Gotta Move
Bitch
Can’t You Hear Me Knocking
I Got The Blues
Moonlight Mile
Brown Sugar
Rock Me Baby
Jumpin’ Jack Flash
Can’t Turn You Loose

domingo, 24 de mayo de 2015

Crítica de The Darkness: Last Of Our Kind (+180 Records, 2015)

En el post anterior hablaba de The Darkness y ya está aquí su nuevo disco. Last Of Our Kind, el cuarto en la carrera de la histriónica banda británica, ofrece otra buena dosis de hard rock divertido, sin ataduras, bebiendo de multitud de influencias para entretener al oyente. Hace ya 12 años que rompieron moldes con el genial Permission To Land. Los aullidos de Justin Hawkins me dejaron patidifuso dentro de un puñado de canciones sensacionales, que enganchaban a la primera mientras invitaban a hacer air guitar al instante. Su hermano Dan completaba la formación junto a Frankie Poullain y Ed Graham con una imagen excéntrica que les ayudó mucho a despegar. Su debut fue un éxito total. Sin embargo, los excesos se cebaron pronto con el grupo y su prometedor inicio, ya que, pese a que One Way Ticket fue una digna continuación, se empezaron a diluir hasta que se separaron. Tras algunos proyectos como Stone Gods o Hot Leg y las típicas peleas familiares, en 2012 volvieron con Hot Cakes ofreciendo la misma receta. Pero seguían los líos. Ed se fue en plena gira, para grabar el nuevo trabajo le sustituyó Emily Dolan Davies, que incluso sale en algún vídeo, y poco después anunciaron que Rufus, hijo del mismísimo Roger Taylor, se ocuparía ¿definitivamente? de los tambores. A ver cuánto dura, porque me encantaría verlos en directo con estos integrantes. Cuando tocaron en La Riviera en octubre de 2012 me lo pasé bomba con ellos. Fue un gran show de rock divertido, con todo tipo de ejercicios gimnásticos imaginables por parte de Justin junto a su mostacho de mosquetero. Fue una demostración de que no hace falta mucha parafernalia, sino buenas canciones y un poco de imaginación, para que el personal saque rentabilidad a su entrada. Su espíritu transgresor me recuerda a Queen, lo que para mí es más que suficiente.




¿Qué encontramos en este Last Of Our Kind? Lo de siempre, aunque un pelín más heavy que en anteriores trabajos. El inicio de Barbarian así lo confirma, mientras que Open Fire, uno de los  mejores temas que han editado hasta ahora, suena a los The Cult más clásicos. Mala referencia tampoco es. El tema título es otra pequeña joya igual que Roaring Waters. A partir de ahí, el disco baja enteros, aunque Mudslide y Hammer And Tongs suben el listón de nuevo. En general, me gusta mucho el trabajo de guitarras de los hermanos Hawkins, no hay abuso de agudos y la batería de Emily suena más que bien. Como buen grupo inglés, la calidad está fuera de toda duda, por lo que seguro que el disco no venderá mal pese a estar en tiempos de descargas y pocas compras. No sé qué  tal les fue en la campaña de crowfunding con la que iniciaron su lanzamiento. Yo me lo agenciaré casi seguro, porque me hacen pasar muy buenos ratos y la verdad, no sé cuánto durarán. Se les va mucho la 'pinza', aunque se supone que eso es el rock and roll. ¿O no?        

sábado, 23 de mayo de 2015

Injusticia: ¿Por qué no se sitúa a Queen a la misma altura que Beatles o Stones?

Cuando se habla de música, o de rock para ser más exactos, siempre surge la misma pregunta: ¿eres de Beatles o de Stones? Se supone que uno debe elegir entre los dos, porque son los más importantes de todos los tiempos, los más vendedores, influyentes, con más talento... Yo lo tengo claro, el dúo Jagger-Richards está muy por encima de Lennon y McCartney. Los de Liverpool están sobrevalorados, aunque tengan un puñado de canciones insuperables, ya que hay mucha paja en el resto de su discografía y temas bastante ridículos. Además, tiran más hacia el pop en vez de centrarse en estilo más rockero de sus inicios. Pero a lo que iba es que, en mi opinión, en ese Olimpo musical falta claramente otro gran grupo: Queen. Hay varias razones para argumentarlo. La primera es Freddie Mercury. No creo que haya existido nunca un cantante tan versátil como el desaparecido líder de los británicos. Dominaba a la perfección todos los registros con una voz potente, irrepetible, y como frontman no tenía rival. Manejaba a las masas a su antojo con esa treatralidad que le hizo insustituible y por eso me da pena que Brian May y Roger Taylor sigan arrastrando el nombre del grupo con vocalistas mediocres ganadores de concursos. Sólo me gustó la elección de Paul Rodgers, otro mito conocido por cantar en Free y Bad Company (ahí es nada) para una gira que presencié y el disco Cosmos Rock que no estaba nada mal. No quiso imitar a Freddie, porque sencillamente no se puede hacer, pero adaptó las canciones más conocidas de Queen a su estilo más blues y el resultado me convenció. Cuando dejaron el proyecto, los miembros originales debieron dejar descansar a la criatura para siempre.  


Segunda razón: la extensa discografía de Queen es realmente increíble. Reúne todos los estilos musicales existentes y ha influido a multitud de bandas posteriores. Su primer trabajo es de 1973 hasta llegar a Innuendo de 1991. En medio, joyas como Sheer Heart Attack, A Night At The Opera, News Of The Wold, Jazz, The Game, A Kind Of Magic... Es difícil quedarse con un sólo disco. Y qué decir del la inmensa variedad que hay en ellos: Hard Rock, Heavy, Blues, Pop, Disco, Funk, música clásica, ópera, árabe, canciones cortas, largas, cambios de ritmo, voces dobladas, coros inmensos, la guitarra ecléctica de May, el omnipresente bajo de John Deacon en, por ejemplo, Another One Bites The Dust (temazo por citar uno). Y por encima de todo, Freddie bordando lo que le echen. Hasta la banda sonora de Flash tiene su punto. La otra que hicieron en A Kind of Magic para Los Inmortales es perfecta, encaja como un guante en la película. Sin la música de Queen estaría incompleta. Además, en una escena suena una versión inédita del New York, New York del mismísimo Frank Sinatra. ¿Alguien da más? Lo dudo.




Tercera razón: ¿es Bohemian Rhapsody la mejor canción de todos los tiempos? Así se ha reconocido varias veces y la verdad, no me extraña. Seis minutos de perfección sublime con esa entrada tan dulce, el puente operístico y la explosión heavy para volver de nuevo a la tranquilidad. Y eso que no es su tema más conocido ni del que se han hecho más versiones. No hace mucho que vi a Robbie Williams (sonó como sustituto de Freddie) interpretando We Will Rock You en directo con ese ritmo de batería tan característico. Bravo por Taylor, cuyo hijo (Rufus) se ha incorporado a The Darkness recientemente para hacerse cargo de los tambores. Me encanta que se se mantenga la tradición inglesa. Así que, como ellos mismos decían en otra de su canciones eternas utilizada en cada victoria deportiva, son unos campeones. No sé si en primer lugar, segundo o tercero en el podio, eso es cuestión de gustos, pero deberían estar ahí por derecho propio. Se lo merecen.  

martes, 19 de mayo de 2015

Sammy Hagar & The Circle: At Your Service (Mailboat Records, 2015)

Otro que no para y por el que no pasa el tiempo. Si a alguien le dices que Sammy Hagar tiene 67 años te tomaría por mentiroso. Pues no es broma, el Red Rocker sigue dando caña cerca de los 70 y está mejor que nunca. Con el proyecto de Chickenfoot (aún me escuece la suspensión de su concierto en Madrid) algo parado, ahora vuelve con un doble disco en directo rodeado de amigos como su inseparable Michael Anthony al bajo, Vic Johnson como guitarrista y Jason Bonham aporreando la batería. Casi nada al aparato. El resultado de este At Your Service no podía ser más brillante, ya que, además, ofrecen un repertorio grabado el año pasado en USA basado en clásicos de su banda más famosa, Van Halen, Led Zeppelin, joyas de Montrose y otras sorpresas. El sonido es apabullante y se nota que se lo pasaron bomba con una gira que retomaron en abril en Norteamérica, aunque no creo que crucen el charco. Ya sólo con el riff de apertura de There's Only One Way To Rock de la carrera de Hagar en solitario te das cuenta de lo que se avecina. Rock Candy (temazo), Good Times Bad Times, Poundcake, When It`s Love, Whole Lotta Love... No hay concesiones en el primer cd hasta llegar a una de mis canciones favoritas de Zeppelin, como es When The Levee Breaks. Me encanta que se hayan acordado de ella, porque ese hipnótico inicio con los tambores sólo lo puede ejecutar Jason tan bien como lo haría su padre, el gran bonzo. Es curiosa la trayectoria musical del hijo del desaparecido batería inglés. Pese a que su valía está fuera de toda duda, siempre va dando tumbos y no ha encontrado una formación sólida para asentarse. Colabora en multitud de proyectos (ojo al de blues con Paul Rodgers), Plant, Page y Jones le llaman cuando les da por resucitar sus días de gloria, y parece que salió tarifando con otra leyenda, Glenn Hughes, de California Breed. Ya veremos si hace algo más con Hagar o se embarca en otra aventura y The Circle queda sólo en una anécdota.




El segundo cd está repleto de clásicos de Van Halen de la segunda etapa como Why Can't This Be Love, Best Of Both Worlds, Right Now o Dreams. Es aquí donde surge la comparación con el Live At Tokyo Dome que los americanos han sacado hace poco con David Lee Roth como cantante. Un trabajo que ha recibido muchas críticas por su sonido crudo, muy directo, en el que se aprecian hasta los fallos de los que nadie se libra. Para mí son inmerecidas y es un placer escuchar la guitarra de Eddie una vez más. Después de tantos años, creo que sigue siendo una fiera, el mejor. Está claro que el concierto de Sammy Hagar que estoy analizando suena más pulido, casi perfecto, y algo habrán tocado en el estudio porque no se puede sonar así de verdad. La realidad es que Sammy conserva mejor la voz, más que bien diría yo, y que Michael Anthony es superior al Wolfgang con las cuatro cuerdas y los coros. Ahora bien, ¿preferencias? Yo me quedo con los dos, no tengo dudas. Así puedo disfrutar de dos discos dobles en directo a la vieja usanza interpretados por unos artistas míticos. Es de agradecer que sigan al pie del cañón y espero que no se retiren nunca por el bien del rock.

jueves, 14 de mayo de 2015

Kill It Kid en vez de la final de Champions y esta vez sí, COC actuarán en Madrid

Problema resuelto. Llevaba tiempo con un dilema en la cabeza dependiendo de quién jugara la final de Champions del próximo 6 de junio en Berlín. Y ayer llegó a su fin. Mi equipo cayó eliminado, por lo que ya no hay duda de que acudiré al concierto de Kill It Kid en la Moby Dick de Madrid. El partido carece de un interés que sí tiene ver en directo a una de las propuestas musicales más interesantes llegadas, cómo no, desde Inglaterra. Los descubrí, una vez más, gracias a la positiva crítica que la revista Classic Rock le otorgó a su último disco, You Owe Nothing. Tienen dos más, el primero que se llama igual que el grupo y el segundo Feet Fall Heavy. Son un cuarteto en el que se turnan como vocalistas Christopher Turpin y Stephanie Ward. Cada vez hay más cantantes femeninas (ya hablaré de Blues Pills o Marmozets) y es algo que se agradece, ya que le dan mucha más variedad y matices a las canciones. El estilo de estos chavales británicos es raro. Partiendo de una base blues, clásica, o incluso soul como en el temazo Caroline, desarrollan un trabajo a la vez con toques modernos a lo Black Keys (los de antes) o Royal Blood, el grupo de moda al que le saldrán clones por todos lados. Según he visto en algún vídeo, en un escenario son bastante intensos, por lo que espero presenciar un concierto más que decente, eso sí, en una sala diminuta. 



Y poco menos después de un mes llegará el plato fuerte. En otro post me preguntaba si la gira de COC con Keenan pasaría por nuestro país. Pues parece que me oyeron, porque el 1 de julio estarán en la sala Arena. Esta sí que es una cita imprescindible incluso aunque España llegara a la final de otro Mundial. Me declaro un seguidor empedernido de Deliverance, Wiseblood y los otros dos discos que hicieron con el Pepper antes de que éste se marchara a los Down de Phil Anselmo. Ya he comprobado en los set lists del inicio de la gira europea que los temas son todos de esa época, por lo que voy a disfrutar de lo lindo. Además, en los vídeos que han colgado se les ve en plena forma. Hay química y no descartan meterse en estudio para deleitarnos con un nuevo disco. ¿Qué más se puede pedir? Si acaso, que la entrada fuera más barata, aunque seguro que merece la pena el esfuerzo de rascarse el bolsillo. 

martes, 12 de mayo de 2015

Ya hay acuerdo: Legendary Pictures lanzará la película sobre Jimi Hendrix

Luz verde para el lanzamiento de la película oficial biográfica sobre Jimi Hendrix. Después de muchos meses de negociaciones, será la productora Legendary Pictures la encargada de distribuir en la gran pantalla la historia del genial e irrepetible guitarrista zurdo. El proyecto llegará precedido del polémico biopic no autorizado del año pasado denominado Jimi: All Is By My Side. Fue dirigido por John Ridley, pero sin la música original de Hendrix al no tener los permisos legales, lo que le quitaba prácticamente cualquier interés. Por si esto fuera poco, la ex novia del músico de Seattle, Kathy Etchingham, reiteró en numerosas ocasiones que no estaba de acuerdo con la aparición en la película de algunas escenas violentas. Afirmó que no se ajustaban a la realidad y que eran producto "de la fantasía" de los autores del film. Ahora aparece un nuevo proyecto, todavía sin título, que será escrito por el autor de 8 Millas: Scott Silver. Buena película aquella en la que el rapero Enimem no lo hacía del todo mal junto a Kim Basinger. Será la continuación del trabajo que empezaron hace cuatro años el director Paul Greengrass y el productor Thomas Tull, pero que no llevaron a cabo por las quejas de Janie, la hermana de Hendrix, ya que se podían haber visto afectadas la ventas del inagotable catálogo del músico. Gran parte de aquel material verá la luz en la banda sonora. Y es que, 45 años después de su muerte, el legado del que es considerado uno de los mejores guitarristas de todos los tiempos, sigue más vivo que nunca. Continuamente aparecen grabaciones inéditas, recopilaciones de todo tipo, se rescatan conciertos (algunos con un pésimo sonido), se reeditan documentales en dvd... En fin, que Hendrix sigue siendo un negocio y su entorno, como es lógico, vigila de cerca cualquier movimiento de esta gallina de los huevos de oro.



No ha trascendido más sobre el quiénes aparecerán en la película definitiva, aunque el actor Anthony Mackie fue la primera elección como protagonista. El resto del casting es aún una incógnita. Por su parte, Andre Benjamin, del programa de tv Outkast Fame, que interpretó a Hendrix en All Is By My Side, admitió que el papel le resultó "complicado. Intentamos hacer al personaje más humano antes que recrear sólo las imágenes que ya existen". Sí que debió ser difícil humanizarle, porque escuchando temas como Purple Haze, Hey Joe o Foxy Lady siempre pensé que Jimi era un extraterrestre. ¿Y qué se puede decir de Little Wing? Posiblemente sea la canción más bella que he escuchado jamás. Años más tarde llegó el marciano Eddie Van Halen desde otro planeta, pero eso es ya otro tema. De momento, vamos a ver si va hacia adelante esta gran idea de relatar la vida y milagros (porque lo eran) de la bestia parda zurda con una Fender Stratocaster encordada al revés, mástil de arce... ¿Os suena a los seguidores del cine? Genial la descripción que hizo Ford Fairlane, el detective del rock and roll, de una figura indispensable de la música.

viernes, 8 de mayo de 2015

Concierto de The Answer (Madrid, Sala Caracol, 7-5-2015): Misión cumplida

Hay grupos que nunca fallan en directo y The Answer es uno de ellos. Es la tercera vez que veo a estos impenitentes rockeros irlandeses que nunca llegarán, utilizando un símil futbolístico, a la Champions, pero forman parte de esa segunda fila de equipos que garantizan una buena competición. Siempre se quedan a media tabla, aunque podrían dar la sorpresa teloneando a más de un grande y superarle con creces. Esta vez venían a presentar su quinto trabajo, un Raise A Little Hell que fue precedido de una campaña de crowfunding que tan de moda se ha puesto. Afortunadamente, todo sigue igual para satisfacción de sus fans. Cormac Neeson tiene una voz privilegiada que acompaña de esos bailes muy a lo Chris Robinson, mientras que sus acompañantes, sin muchos alardes eso sí, cumplen de sobra para ofrecer una velada de blues rock clásico sin fisuras. El sonido en la Caracol (sigue abierta hasta nuevo aviso) no acompañó del todo con el bajo demasiado alto, lo que fue equilibrado por el buen rollo, entrega y buenos temas que ofreció la banda. Sonaron muchas canciones nuevas, para mi gusto demasiadas, mezcladas con otras del New Horizon, Revival, Everyday Demons y sólo dos del indispensable Rise. Una pena, porque su debut, publicado en 2006, es una joya para los amantes del género. Nunca lo han igualado o mejorado y escuchar Preachin' y Under The Sky siempre sube un punto sus conciertos. Me quedé con ganas del Come Follow Me. Otra vez será. Lo que sí se nota es que son un grupo de carretera, con muchos bolos encima y que disfrutan de lo que hacen. Hubo un par de jams como con la que alargaron Last Days Of Summer que fue uno de los grandes momentos de una actuación más que correcta. Otro llegó cuando Neeson se bajó del escenario para pedir a los asistentes que se agacharan mientras crecía el estribillo del Raise A Little Hell. Un buen detalle. Algún retazo acústico, un poco de armónica... Fue el mismísimo Gene Simmons el que dijo hace poco que el rock está muerto. Es una opinión respetable, aunque con grupos como The Answer devorando kilómetros de giras, sudando cada nota, yo creo que está más vivo que nunca. Seguiremos informando de su estado de salud.